viernes, 26 de noviembre de 2010

La caridad

La segunda marca distinta de la caridad es que, diferentemente de las formas inferiores del amor,
no es una emoción. Empieza con un acto de la voluntad y se consuma como un advertimiento
puramente espiritual, un unitivo amor-conocimiento de la esencia de su objeto.

Entiendan todos que el verdadero amor de Dios no consiste en lloros, ni en aquella suavidad y
ternura que usualmente anhelamos, sólo porque nos consuelan, sino en
servir a Dios en la justicia, fortaleza de alma y humildad.



Santa Teresa




El Yo y la Unidad

Aprende a mirar con ojos iguales a todos los seres viendo
al Yo uno en todos.

Srimad Bhabavatam

Aceptación

Como una abeja que recoge miel de distintas flores, el hombre prudente acepta la esencia de las distintas Escrituras y ve sólo lo bueno de todas las religiones.

Del Srimad Bhagavatam

Filosofía perenne

Benarés está hacia el Este, la Meca hacia el Oeste; pero explora tu corazón,
pues ahí están los dos, Rama y Alá.



Kabir

martes, 2 de noviembre de 2010

El Zen

El Zen es una vuelta a lo concreto, no para esclavizarme a él sino para que lo superemos al conocer sus causas.
El sentido de la acción de la que se acaba de hablar, se encuentra admirablemente definido en un antiguo texto hindú, el Yoga Vasishta.

Allí se dice:

1. Estable en el estado de plenitud que brilla en el momento en que has renunciado por completo a tus deseos y apacible en el estado de aquel que, viviendo, es libre, actúa con pleno gozo dentro del mundo, ¡Oh, Raghava!

2. Interiormente libre de cualquier deseo, sin pasión ni apego, sino exteriormente activo en todas las direcciones, actúa con pleno gozo dentro del mundo, ¡Oh, Raghava!

3. De noble proceder y de benevolente ternura, conformándote, en el exterior, a los convencionalismos, pero interiormente libre de ellos, actúa con pleno gozo en del mundo,  ¡Oh, Raghava!

4. Al percibir la evanescencia de todas las etapas y experiencias de la vida, permanece resueltamente en el estado trascendente sublime y actúa con pleno gozo dentro del mundo, ¡Oh, Raghava!

5. Sin ningún apego en el fondo de tí mismo, a pesar de que en apariencia actúes como si estuvieras apegado a algo, sin quemarte en tu interior, pero ardiente en el exterior, actúa con pleno gozo en el mundo, ¡Oh, Raghava!