domingo, 26 de septiembre de 2010

Salutación a Dios, como Gran Preceptor

(De las escrituras Sáncritas)

Dios de bienaventuranza; Deleite supremo transcendente; inmune a la dualidad; claro como el diáfano cielo; Emisor de Tú eres eso; el Uno, eterno, puro, inmutable, Testigo omnipresente; exento de las tres cualidades de la Naturaleza; fuera del alcance del pensamiento. ¡Oh Divino Preceptor, ante Tí me prosterno!