jueves, 7 de marzo de 2013

LA MEDITACIÓN BUDISTA

La comprensión es el fruto de la meditación. Cuando practicas el observar profundamente la esencia de la realidad, recibes ayuda, comprensión y sabiduría, todo lo cual te hace libre. Si dentro de ti hay un profundo sufrimiento, debes meditar.
Meditar no es intentar huir o ignorar la presencia del sufrimiento, sino al contrario, es mirarlo cara a cara. Has de acostumbrarte a observar directamente la naturaleza de ese sufrimiento, porque para los budistas somos felicidad y sufrimiento, conocimiento e ignorancia al mismo tiempo.
Meditar no es transformarse uno mismo en un campo de batalla en el que un bando lucha contra el otro, donde el bien lucha contra el mal. La meditación budista no consiste en esto, sino que se basa en el principio de la no dualidad. Y esto significa que si somos plenamente conscientes, si somos amor, también somos ignorancia y sufrimiento, y no hay ninguna razón para reprimir ninguna de estas energías.

Thich Nhat Hanh