lunes, 22 de abril de 2013

El centro del ser - fragmentos -

Estar en concordancia con el Ser no significa estar en un estado de perfección. Querer alcanzar la perfección es un error que no debe cometer aquel que está en camino. Nuestra verdad es a menudo bastante miserable en comparación con nuestro ideal.
"Estar unido a la trascendencia no significa que realicemos de forma perfecta "lo que debe ser un hombre", sino tener la fuerza de vernos en nuestra verdad del momento.
"La trascendencia no se manifiesta cuando sobrepasamos el nivel humano sino precisamente ahí donde reconocemos ese nivel humano, cuando reconocemos nuestra debilidad."

Karlfried Graf Dürckheim
Es muy difícil dar una definición de lo esencial. Lo esencial es aquello de lo que no se puede dar una definición. Lo esencial para el hombre es una experiencia profunda, y, de la misma manera que no se puede dar una definición de lo que es rojo o de lo que es azul, no se puede dar una definición de lo esencial. Lo que se puede hacer es reconocer las experiencias que nos permiten utilizar las palabras esencia, esencial o Ser esencial y que nos fuerzan incluso a utilizarlas para nombrarlas.
Si existe lo esencial, es que hay algo que no es esencial.
¿Cuáles son las experiencias que nos autorizan a utilizar esta última palabra?
Me parece que debemos ver dos cosas. En castellano está la palabra "esencia", la esencia de las cosas. Es lo que distinguimos de la apariencia de las cosas. La esencia es la realidad profunda. La esencia de todo lo que está vivo es eso que podemos llamar la Vida.
La Vida no es la suma de todo lo que está vivo; es aquello que hace que todo lo que está vivo ¡viva! Pero esto es aún abstracto. Como experiencia, existe algo que toca al hombre de un modo particular. Puedo mirar una flor y decir: "Es una rosa, es un lirio"; puedo decir que es bella, y esto no tiene nada que ver con lo esencial. Y de repente puedo sentirme tocado por una profundidad y saborear una cualidad completamente diferente, una cualidad que me concierne como hombre entero. En el plano de la experiencia la palabra "esencial" indica algo que nos toca en profundidad. Podríamos decir tal vez que esta cualidad toca a "otro" nosotros, en el sentido de que en esta experiencia no somos el mismo, somos otro.
Debemos también hablar de nosotros mismos como Ser esencial. Se podría decir que existe el hombre como ser condicionado por las condiciones de su existencia y las circunstancias. Y existe el hombre como ser no condicionado. Y es ahí donde manifiesta al Ser, con una S mayúscula, que busca realizarse en el hombre a través de lo que yo llamo su Ser esencial.

K. G. Dürckheim