jueves, 1 de marzo de 2012

La comprensión del sufrimiento...

La comprensión del sufrimiento no consiste en descubrir cuál es su causa. Cualquier persona puede saber cuál es la causa del sufrimiento: su propio descuido, su estupidéz, su estrechez, su brutalidad, etc. Pero si yo considero el sufrimiento en sí mismo sin desear una respuesta, ¿Qué ocurre? Como entonces, no me escapo, empiezo a comprender el sufrimiento: mi mente está vigilante y alerta, es penetrante, lo cual significa que me vuelvo sensible, y siendo sensible me doy cuenta del sufrimiento ajeno. Por consiguiente no soy duro; soy bondadoso no sólo con mis amigos sino con todo el mundo, porque soy sensible al sufrimiento. Somos duros porque hemos llegado a ser insensibles al sufrimiento; nuestra mente se ha embotado a fuerza de evasiones. La evasión confiere una buena dosis de poder, y el poder nos agrada; nos gusta tener una radio, un automóvil, un avión; nos gusta tener mucho dinero y disponer de inmenso poder. Mas cuando comprendéis el sufrimiento no hay poder, no hay evasión mediante el poder. Cuando comprendéis el sufrimiento hay benevolencia, hay afecto. El afecto, el amor, exige la más elevada inteligencia: y sin sensibilidad no hay gran inteligencia.


Jiddu Krishnamurti