jueves, 1 de marzo de 2012

Poema sufi

Hazte como la comunidad, para que puedas sentir la alegría espiritual;
entra en la calle de la taberna, para que puedas ver a los bebedores
de vino.
Apura la copa de la pasión, para no sentir vergüenza; cierra los ojos
de tu cabeza, para ver el ojo oculto.
Abre tus brazos, si deseas un abrazo; rompe el ídolo de arcilla, para
contemplar el rostro del Hermoso.
¿Por qué consientes pagar un precio tan alto por una anciana?, y
¿hasta cuándo mirarás la revolución (del tiempo)?
Mira ahora, he aquí un pacto: da una vida y recibe cien. Dejad de
portaros como perros y lobos, para que podáis experimentar el amor
del Pastor.
Tú dijiste, "Mi enemigo se llevó a tal de mi lado." Ve, renuncia a esa
persona para contemplar Su ser.
Ni pienses en nada excepto en el creador del pensamiento, preocu-
parse por el alma es mejor que preocuparse por el pan diario.
¿Por qué cuando la tierra de Dios es tan ancha, caes dormido en una
prisión? Evita los pensamientos enredados, para que puedas ver la ex-
plicación en el Paraíso.
Abstente de hablar, para que puedas conquistar el habla en el futuro;
abandona la vida y el mundo, para que puedas contemplar la Vida del
mundo.

Yalal al- Din Rumi